En el PRI no encuentran a quien culpar por su derrota electoral del 5 de junio pasado y por ello enderezaron sus baterías en contra de la Iglesia; la acusan de haber operado en contra de los candidatos tricolores, al no estar de acuerdo con la propuesta del presidente Peña Nieto de legalizar las uniones entre personas del mismo sexo.
Desde varios espacios periodísticos de la Ciudad de México, ligados a la Presidencia de la República, acusan a la Iglesia de montar un operativo para influir en la conciencia del electorado estableciendo la premisa de que la propuesta de Peña Nieto es atentatoria contra varios principios religiosos. Ese llamado a la feligresía determinó los triunfos que tuvo el PAN en Aguascalientes y marcó la derrota del PRI.
Pero en la acusación que hacen contra la Iglesia hay algunas imprecisiones y también muchos deseos de tener a quien culpar de la derrota.
Para empezar, en los espacios periodísticos se acusa de manera directa a personajes que forman parte de la Jerarquía Eclesial y si bien forman parte de la Iglesia, no son la Iglesia.
En realidad, la Iglesia la conforman la jerarquía eclesial, la curia, los sacerdotes, las órdenes de religiosas, las organizaciones católicas de laicos y los católicos en general; este mismo principio se aplica para otros grupos religiosos.
En este punto, lo que se vio no fue un operativo montado por la jerarquía eclesial o por sus sacerdotes; de hecho a los jerarcas se les reclama su pasividad y permisividad; en realidad fueron las organizaciones de católicos y los católicos quienes exigieron a los candidatos de todos los partidos, hacer el compromiso de no apoyar la propuesta de Peña Nieto.
Ejerciendo su derecho pleno a elegir a quienes quieran, los católicos decidieron darle su voto a aquellos candidatos a quienes sintieron comprometidos con su causa y se negaron a apoyar a los priístas identificados con el presidente Enrique Peña Nieto.
En una democracia real, una acción de esa naturaleza no debería asustar a nadie y menos es motivo para generar enojo.
En todo caso, al que deben culpar por el mal momento escogido para presentar la propuesta es al mismo presidente Peña Nieto; no solamente lo hizo en el peor momento de su gobierno, con una pésima imagen pública y con las más bajas calificaciones para un Mandatario desde que se realizan ese tipo de mediciones, también porque patentizó su petición a mitad de un proceso electoral donde cualquier factor ajeno podía determinar el rumbo de la elección.
Pero además, ¿acaso los grupos impulsores de la propuesta, columnistas incluidos, pensaban que la iniciativa presidencial iba a ser ignorada por la sociedad y una población que en un 88 por ciento se declara católica? ¿Creían acaso no iban a protestar por querer darle categoría de matrimonio a las uniones entre personas del mismo sexo? un aspecto que choca con una tradición cultural muy arraigada en la sociedad y que nadie tiene el derecho de alterar.
Los mexicanos que votaron en contra del PRI vieron la oportunidad de cobrarse los agravios de la corrupción del PRI; de sus malos gobiernos y a ellos se sumaron los católicos que vieron un atentado a la institución de la familia el darle categoría de matrimonio a las uniones de persona del mismo sexo.
Pero desde los altos círculos del poder achacan a los católicos la derrota, a fin de cuentas poretenden que de esa manera se les reste responsabilidad sobre la corrupción, les quita culpa de haber dejado a malos gobernantes ejercer el poder solamente para pagar favores políticos; con eso justifican una derrota que tuvo muchas aristas y donde los grupos católicos incidieron en una pequeña parte.
Tips cortitos pa´no enfadar:
1.- El alcalde Manuel Ignacio “El Maloro” Acosta anunció hace unos días que para este 2016 no se aplicarán los tandeos en el servicio de agua potable, esa es una muy buena noticia porque más allá de que la Capital de Sonora no padecerá sed, también es una garantía para el desarrollo industrial.
Hasta donde sabemos el agua que trae el Acueducto Independencia no llega a la cuota total autorizada y el abasto se viene sosteniendo con la batería de pozos de “Los Bagotes”, “La Victoria” y la que tiene la presa Abelardo L. Rodríguez, aunque ante la necesidad de más líquido en la red, seguramente se abrirán las válvulas de la presa “El Novillo”.
2.- Duro y a la cabeza se tiran los panistas que buscan la dirigencia del Partido; ayer fue Adrián Espinoza quien se lanzó en contra de Javier Gándara, quien apoya a David Galván, pero no tardó mucho en recibir respuesta.
Esto se publicó ayer en la cuenta de Facebook de “Alianza Ciudadana”: “Partiendo de la premisa que los partidos políticos son financiados con dinero público, es también nuestra obligación participar en el análisis de uno de los aspirantes a dirigir el PAN en Sonora, en donde se llevará a cabo dicha elección el próximo mes de agosto.
“Adrián Espinoza, es uno de ellos y ya fue secretario general del Instituto político además de efímero funcionario durante la administración de Guillermo Padrés a quien se dice traicionó a pesar de deberle gran parte de su carrera política.
“El oriundo de Guaymas cuenta con un negro pasado también como empresario ya que en su natal Puerto de Guaymas, fundó una agencia de viajes en la que fraudeo a decenas de personas incluidos ciudadanos canadienses y estadounidenses.
“Guillermo Padrés siendo gobernador en funciones tuvo fuertes diferencias con Espinoza y mejor lo «mandó» a una maestría en Europa.
“Las diferencias fueron porque Adrián se embolsó muchos millones de pesos de algunos programas lo que significó que Padrés quedara muy comprometido y evidenciado.
“Realmente no vemos y no creemos que le interese el destino de Acción Nacional mucho menos servir a la sociedad, Adrián busca sin lugar a dudas ser diputado plurinominal, es un individuo al que siempre le ha interesado solamente su beneficio personal aún desde sus inicios como mesero en el Howard Johnson en San Carlos.
“Por tanto, si Adrián Espinoza llega a ser favorecido con el voto de la militancia, seguramente el partido se convertirá en un negocio familiar perdiendo la esencia y dejará de ser oposición”.
3.- Algunos colegas columnistas se molestaron porque Manuel Ignacio “El Maloro” Acosta se tomó una fotografía con el nuevo arzobispo de Hermosillo, monseñor Ruy Rendón Leal; según ellos violó varias leyes y por ello hasta le buscan sustituto para cualquier cosa a la que aspirara.
Curiosa esa postura y miope también; si critican al alcalde de Hermosillo, deberían usar el mismo tono para cuestionar que la gobernadora fue hasta las oficinas de la Curia para saludar a Monseñor Ruy Rendón y también se tomó una fotografía, que fue hasta portada de algunos medios impresos.
Ni la gobernadora Pavlovich, ni “Maloro” Acosta cometieron delito alguno, simplemente cumplieron la formalidad de establecer un vínculo de trabajo con el representante de la institución religiosa más importante de Sonora; esas expresiones son solamente ganas de hacerse notar.
Otros Juglares:
–“Como ya lo han señalado puntualmente nuestros legisladores, con el fortalecimiento de la Secretaría de la Función Pública, habrá un efectivo combate a la corrupción, con lo que se estará atendiendo una exigencia de la sociedad en general, pues esta dependencia debe recobrar su credibilidad, la cual desgraciadamente se perdió con la investigación realizada con motivo del llamado caso de la casa blanca.
“En el PAN estamos a favor completamente de la transparencia y de la rendición de cuentas, además la sociedad lo que quiere es que se combata la corrupción y que se transparenten todas las licitaciones del Gobierno Federal, estatales, municipales».
Lo dijo el dirigente del PAN al felicitar a sus legisladores federales, asegurando van a corregir los yerros del Sistema Nacional Anticorrupción; no dijo nada en torno al abandono que hizo el senador Héctor Larios Córdova, con lo cual favoreció se aprobara tal aberración.
Gracias por su atención, hasta el lunes si Dios quiere. ¡¡Salud!!
