El Juglar de la Red
Por Rafael Cano Franco
Luego del escándalo que generó la pésima trasmisión del debate entre los candidatos a la gubernatura, el Instituto Estatal Electoral tardó, pero finalmente emitió un comunicado que por cierto no fue avalado por todos los consejeros. La versión del Instituto Electoral de Sonora indica que hubo una interferencia –“hackeo”” que afecto a la señal que va al satélite y de ahí se generaron las fallas.
La versión emitida por el IEE no tiene sustento en ningún estudio técnico, tampoco se anexan pruebas para comprobar sus dichos, es una versión tan general que solamente deja la víbora chillando y no satisface en lo más mínimo.
Pero además es una burda mentira.
Tres colegas distintos, cada uno por separado, han hablado de la posibilidad de que la señal fuera “hackeada” de manera dolosa y con el único fin de beneficiar a alguno de los personajes que participaba en el debate.
Morena emitió un posicionamiento pidiendo una investigación y que se explicara el motivo de las fallas; por su parte el PAN en Sonora presentó una denuncia ante instancias judiciales para sentar un precedente sobre el tema.
Ni el IEE va a investigar y tampoco lo van hacer las instancias judiciales; la realidad es que a todos los gustó lo del complot o la intervención tipo “Misión Imposible”, pero eso es ficción.
El “hackear” un señal en el satélite no es un asunto de novatos, de hecho se requiere la participación de un agente de estado que conozco los protocolos de seguridad del satélite a intervenir, pero además debe tener las coordenadas de su posición y eso no es asunto menor.
Nos dimos a la tarea de consultar a expertos en el tema, ingenieros de telecomunicaciones que conocen a detalle de trasmisiones televisivas, a través del llamado “streaming” y que tienen años trabajando en el tema.
De entrado nos aseguraron que los argumentos presentados por el IEEyPC referentes a las fallas presentadas en el debato son técnicamente injustificables.
Señalan que la señal satelital no podría ser intervenida o “hackeada” a través de la línea que conecta a la señal de internet, al no tener conexiones entre sí. Coloquialmente explicaron que la unidad móvil manda una señal al satélite y otra al “streaming”, ambas forman una “Y”.
El mencionado “hackeo” a la trasmisión de internet no está conectado con el satélite. Es decir, desde la Unidad Móvil la señal sale en forma de “Y”, pero nada tiene que ver una línea con la otra. De haber ocurrido asó, no se registrarían fallas con la señal que estaba conectada con las de las televisoras.
Nos dicen que “hackear” el satélite es tanto como matar una mosca a cañonazos, es una acción que no se justifica para “descarrilar” una trasmisión de un simple debate de candidatos a la gubernatura.
Desde la opinión de los expertos técnicos lo que sucedió fueron fallas de origen como se señaló desde un principio, al tratarse de inconsistencias internas por parte del equipo técnico que emitió la señal principal.
En palabras más claras la empresa contratada –que por cierto sigue bajo estricto anonimato— no tuvo las capacidades técnicas para generar una trasmisión nítida y de la mejor calidad.
Cuando se “hackea” una señal de “streaming”, las imágenes no se repiten, solo baja la calidad de la imagen o se congela como su fuera un “zoom”, desde la experiencia de los técnicos consultados el IEEyPC no fue víctima de hampones cibernéticos, lo que sucedió fue un fallo catastrófico generado por la empresa contratada y sus “técnicos” que no supieron mandar desde la unidad móvil la señal al satélite.
Lo que no se entiende es esa terquedad del IEEyPC y de su presidente Guadalupe Taddei de seguir mintiendo a los sonorenses, a menos claro que el contrato para la empresa sea tan jugoso que deba ser protegida por aquello de que luego no hay reparto en el pastel.
“El Borrego” va adelante con 5 puntos
Si usted es simpatizante de Alfonso Durazo le recomiendo que se salte esta parte, eso le evitara cólicos, vahídos, mareos y algunos improperios; por el contrario si simpatiza con Ernesto “El Borrego” Gándara, lea hasta el final.
Las encuestas han venido dejando claro, al menos en Sonora, que Ernesto “El Borrego” Gándara mantiene una clara tendencia a la alta, salió con 17 puntos de desventaja pero en dos meses de campaña y ya en la recta final, logró, primero alcanzar y luego rebasar, al abanderado de Morena, Alfonso Durazo Montaño.
Aunque luego hay quien se siente “muy ofendido” es obligación decir que el doctor Alfonso Durazo se mantiene en campaña porque la marca Morena le ayuda sobremanera, el problema es que él no le suma mucho y por el contrario sus actitudes y dislates sí le restan.
La Casa Encuestadora “Arias Consultores”, viene realizando evaluaciones desde que iniciaron todas las campañas a la gubernatura y en cada una de ellas va mostrando como las tendencias empezaron a cambiar, en algunos estados de manera drástica.
De acuerdo a su quinta evaluación, fechada el 28 de abril, en el caso de Sonora, el candidato de la Alianza va por Sonora, Ernesto “El Borrego” Gándara se puso al frente de la contienda electoral con el 40.5 por ciento de las preferencias electorales.
Por su parte el candidato de Polanco, Alfonso Durazo volvió a disminuir, ahora con un -3,4 por ciento y llegó del 39.2 por ciento que tenía en la evaluación anterior al 35.8 por ciento en esta, es decir está cinco puntos debajo de Gándara Camou.
Ricardo Bours Castelo, de Movimiento Ciudadano, también presentó un incremento del 4 por ciento y alcanzó el 16.5 por ciento de la intención de voto.
Así mientras que “El Borrego” Gándara sigue sumando y sumando, haciendo una campaña alegre, de mucho contacto ciudadano y con propuestas al por mayor; Alfonso Durazo está “ensoberbiado” pensando que le va a alcanzar solamente con la marca Morena y por tanto se da el lujo de rechazar debates, como el de Televisa, a los que decide no asistir pero no porque asuma la posición de líder, más bien porque no le conviene volver a recibir otra paliza como la del martes pasado.
Y es que entre ambos candidatos hay marcadas diferencias, “El Borrego” hizo campaña con una lesión en las costillas, se aventó 21 eventos en Cajeme a pesar de tener golpes que le generaron un intenso dolor; en ese lapso el doctor Alfonso Durazo viajó a la Ciudad de México –dicen que a prepararse para el debate, lo cual no le funcionó—y dejó de hacer campaña en todo ese tiempo, lo cual ya le está afectando en esta recta final.
Nota aclaratoria
Esta columna se publica en diversos portales de comunicación de Hermosillo y otras ciudades de Sonora, algunos colegas nos hacen el favor de considerarla en sus síntesis de prensa y otros más la retoman para sus comentarios de radio, también aparece en medios impresos y digitales de Ciudad Juárez, Durango, en Chihuahua, Mexicali y Tijuana; en Guadalajara, en Mérida y en varios medios de Oaxaca.
A todos ellos les agradecemos la confianza y la estima por los comentarios que aquí se expresan.
Pero es menester aclarar que no la publicamos en Ehui.com donde algunos despistados todavía creen que aparece. Ehui.com es un portal digital al que le tenemos profundo cariño pero hace seis años que no tenemos relación editorial o laboral con ese medio.
Digo para que no anden opinando a tontas y locas y cuando menos emitan una opinión más informada de quien escribe en este espacio.
Otros Juglares:
–“Estimado @sergiovallep en atención a tu comentario final en tu columna Pros y Contras publicada el día de hoy , donde comentas que se celebrará un debate en @TelevisaSON el próximo 3 de mayo, me parece sumamente atinado aclarar que @AlfonsoDurazo no asistirá como se lo anunciamos”.
Un mensaje en Twitter emitido por Edgar Hiram Sallard donde señala que el candidato de Morena no acudirá al debate que organiza Televisa y que los deja colgados de la brocha; como bien dicen por ahí: “Los Refugios no gustan de acudir a las conflagraciones bélicas” y ya en lo popular: “los Cucos no van a la guerra”, como decimos en Sonora.
Gracias por su atención, hasta el martes si Dios quiere. ¡¡Salud!!
Nos puede leer en Twitter en @CanoFrancoR También puede conocer nuestra opinión periodística en Facebook en Rafael Cano Franco “El Juglar de la Red”.
