Los hermosillenses atestiguan como han ido desvaneciendo los 60 millones de pesos invertidos en uno de los puentes más emblemáticos de la pasada administración, lo que resulta indígnate y vergonzoso para la imagen de la Capital sonorense.
El puente vial construido sobre el bulevar Morelos, proyecto que fue presentado con ‘bombo y platillo’ el 20 de mayo de 2011 por el ex gobernador panista, Guillermo Padrés Elías, decayó junto con la administración que lo proyectaba como un distribuidor vial, el cual sanearía el caos vial que a diario se presentaba durante las “horas pico”.
Esta construcción estuvo a cargo de la Secretaria de Infraestructura y Desarrollo Urbano (Sidur), en ese entonces con el titular, José Inés Palafox, quien presumía dicha inversión millonaria por la federación, estado y municipio, beneficiaría a 90 mil automovilistas que circulan continuamente por el crucero con el Periférico Norte.
Esta obra se presentó como la primera emblemática de la administración de Padrés y fue evidente su endeble infraestructura. Apenas cumplió tres años, los estragos de una lluvia con fuerte viento derribaron los plafones que vestían la torre, así como el característico logo de las cinco estrellitas.
Esa misma tarde, Padrés Elías se presentó al lugar para ver las afectaciones y enviaron un boletín informando que los daños habían sido mínimos, pero lo que se quedó grabado en la mente fue la foto donde aparecía un gobernador que veía abatido como se derrumbaba una parte de la obra más representativa de su gobierno, se consideró que aquello era una premonición del derrumbe que se veía venir para el “Padrecismo”.
Ese daño no fue reparado. El nuevo gobierno menos le tomó importancia.
El pasado 2 de marzo, en el mismo distribuidor vial se incendió la torre decorativa, lo que provoco un fuerte caos vial y movilización del personal de Bomberos de Hermosillo, Protección Civil y autoridades del Gobierno del Estado.
El aparatoso incendio de la estructura, cuyo interior era de fibra de vidrio un material altamente flamable, se inició con la llama de dos encendedores por un joven, al cual arrestaron días después. Desde ese momento se “bautizó”: “El puente quemado”.
A la fecha el puente luce quemado, aún con cenizas, sin plafones que lo vistan y sin el logo que presumía. Esto resulta familiar para quienes pasan diariamente sobre o debajo de él, pero no para quienes ocasionalmente transitan el Morelos, menos para las visitas a quienes les deja un mal sabor de boca.
Es ahí cuanto tocamos el punto del “rencor partidista”, es decir, si el actual gobierno no lo construyó, tampoco tiene porque buscar estrategia para remediar esta fatal imagen. La Sidur cuenta con un presupuesto para el mantenimiento de la imagen de la ciudad, así como la misma dependencia a nivel municipal, Cidue. Pero ninguna se preocupa por esa pésima imagen.
Esta actitud es común en los gobiernos: Jorge Valencia Juillerat dejó que el reloj de “Gastón” no tuviera mantenimiento y eso derivó en la descompostura de su maquinaría; se trataba de hacer quedar mal al antecesor por la sencilla razón de ser de otro partido.
La suplica de la remediación es una constante, que no ha sido escuchada por ser éste distribuidor vial el recuerdo de la pasada administración; está claro que al efectuarse la reparación no se le agradecería ni al pasado ni al actual gobierno, pero eso no evita que esa obra sea un compromiso con el ciudadano.
Amparos al 3 x 1
La incalculable cantidad de amparos judiciales solicitados por el ex gobernador panista, Guillermo Padrés Elías ya ha sido tratado en este espacio, sin embargo resulta sorprendente el número y ante quien los interpone.
Padrés Elías radica actualmente en la ciudad de México, donde con frecuencia asiste a los juzgados federales en compañía de su representante legal, solicitado amparos del fuero federal y común en contra de particulares y dependencias como la Procuraduría General de Justicia del Estado de Sonora y ayuntamientos, entre otras.
El pasado 15 de junio solicitó uno en contra de una demanda penal que le interpuso el Ejecutivo del Estado, el expediente 254/2016 menciona que el amparo se encuentra en revisión y podría referirse a uno de los tres delitos por los cuales es investigado por la Procuraduría General de la República (PGR).
La tercia de delitos que la fecha ha revelado la PGR y de los cuales podría tratarse dicha demanda interpuesta por el Gobierno del Estado son: ejercicio indebido del servicio público, abuso de funciones y delitos contra la administración de la justicia.
El recurso solicitado por Padrés Elías, aún se encuentra en revisión por los magistrados Juan Manuel García Figueroa, Mario Toraya y Francisco Domínguez Castelo, en el juzgado quinto circuito primer colegiado penal y administrativo.
Sin embargo, como éste existe una lista interminable de los procesos de protección legal que ha solicitado Padrés Elías, a la semana podrían calcularse tres solicitudes en aproximado para conocer el expediente o para evitar una orden de aprehensión.
El miedo no anda en burro, asegura el refrán popular.
Gracias por su tiempo.