Por Redacción
El Departamento de Justicia de Estados Unidos ha redoblado sus esfuerzos para desmantelar Google al pedirle que renuncie a la tecnología que impulsa su red de publicidad digital. El plan se suma a otro esfuerzo federal para desvincular el navegador Chrome de su motor de búsqueda dominante.
La más reciente propuesta del gobierno fue presentada la tarde del lunes en un tribunal federal de Virginia, dos semanas y media después de que un juez federal dictaminó que varias partes de la lucrativa red de publicidad digital de la empresa han abusado indebidamente de su poder de mercado para sofocar a la competencia en detrimento de los editores en línea.
En un documento de 17 páginas, los abogados del Departamento de Justicia argumentaron que la jueza federal de distrito, Leonie Brinkema, debería castigar a Google ordenándole que se deshaga de su negocio AdX y de la plataforma de anuncios DFP, herramientas que reúnen a anunciantes que quieren comercializar sus productos con editores que quieren vender espacio comercial en sus sitios para generar ingresos.
No es de sorprender que Google planee oponerse vehementemente a la idea cuando la fase de penalización del caso comience.