Por Redacción
En los últimos tres años, las fuerzas armadas de Estados Unidos han invertido más de 6,000 millones de dólares en reclutamiento y retención de soldados, lo que ha resultado en una campaña en aumento para suplir la falta de alistamientos.
Los estímulos económicos para reinscribirse en el Ejército, la Marina, la Fuerza Aérea y los Marines se incrementaron significativamente desde 2022 hasta el año anterior, siendo la Marina la que más invirtió en comparación con las otras instituciones, según los montos de financiación divulgados. El volumen total de bonos de reclutamiento también se incrementó constantemente, motivado por aumentos notables en el desembolso del Ejército y el Cuerpo de Marines.
A lo largo de los años, los servicios militares han realizado inversiones regulares en bonos de reclutamiento y retención. Sin embargo, los totales se incrementaron cuando los líderes del Pentágono trataron de contrarrestar el descenso en los alistamientos, especialmente cuando las limitaciones causadas por el COVID-19 causaron la cancelación de eventos públicos, ferias y visitas escolares que los reclutadores utilizaban para conocer a los jóvenes.
Además de una variedad de nuevos programas, un incremento en el número de reclutadores y modificaciones en los requisitos de alistamiento, los incentivos extra han contribuido a que los servicios se recuperen de la falta de recursos. Todos, a excepción de la Marina, alcanzaron sus metas de reclutamiento el año anterior y se espera que todos lo realicen este año.
El presidente Donald Trump y el secretario de Defensa Pete Hegseth señalan repetidamente la elección de Trump como un motivo en el repunte de reclutamiento.
Con información de: AP
