El Juglar de la Red
Por Rafael Cano Franco
Podemos mencionar muchas cosas positivas que tiene el alcalde de Hermosillo, Antonio Astiazarán Gutiérrez, pero el deporte y su promoción no es precisamente una de ellas y hay varios casos que ejemplifican como desde el Ayuntamiento de Hermosillo en lugar de promover y apoyar, toman el asunto como un gran negocio.
Los espacios deportivos no abundan en Hermosillo, los pocos que hay son insuficientes para atender la demanda de padres de familia que ven en las prácticas deportivas una excelente opción para mantener ocupados a sus hijos y fomentar en ellos un desarrollo sano. En el Ayuntamiento de Hermosillo en lugar de generar facilidades, lo que se dedican es a obstruir, amenazar y establecer cobros impagables para quienes tienen la intención de promover el deporte en los jóvenes.
Lo que ha sucedido con la Liga Buhitos es una prueba de como el deporte es un aspecto terciario para el gobierno de Toño Astiazarán. El otro caso es el del Club Montecarlo de Beisbol Infantil A.C.
Hace casi seis años, Eduardo Velázquez vio un terreno baldío en su fraccionamiento, Montecarlo, era un erial que daba mal aspecto a la colonia, con sus recursos personales, algunos patrocinios y el apoyo de muchos empresarios que creyeron en su proyecto, determinaron convertir aquel baldío desértico en un hermoso y bien cuidado parque para jugar beisbol infantil, softbol y que lo pudieran utilizar niños, niñas, mujeres y hombres adultos.
Con el apoyo de la entonces diputada Kitty Gutiérrez logró que le instalaran una toma de agua y la ex alcadesa Célida López, al ver la participación de los niños que ahí se desarrollaban, determinó que Agua de Hermosillo no le cobrara el suministro del líquido.
El propio Eduardo Velázquez buscó la manera de que CFE le instalara alumbrado público y con la participación económica y la mano de obra de los niños, niñas, mujeres y hombres que ahí acuden a practicar deportes, no solamente logró mantener el campito, también lo hizo destacar dentro del fraccionamiento, un lugar donde abundan otros cinco o seis terrenos baldíos a los que nadie quiere entrarle por el trabajo y esfuerzo que representa.
Ni el Ayuntamiento de Hermosillo, ni la Asociación de Vecinos de Montecarlo, absolutamente nadie le invirtió un peso al terreno.
Eduardo Velázquez cobra cuotas a los niños que van a clases deportivas, también organizó torneos deportivos donde se aporta una fianza para tener derecho a juego, pero ese dinero apenas alcanza para pagar los gastos que genera el mantenimiento, el cobro de la luz e incluso mantener el camellón que está frente a la instalación.
La intención de Eduardo Velázquez siempre ha sido muy clara: seguir promoviendo el deporte en un espacio que le sea entregado en comodato, con esto tiene seguridad jurídica y puede planear otras mejoras.
Pero en los últimos días se convirtió en el centro de una campaña de difamación; un artero ataque a su trabajo como promotor deportivo, a su vida personal y a una campaña de difamación donde confluyen diversos personajes como Rebeca Villanueva, empleada en el Ayuntamiento de Hermosillo.
La primer andanada fue exhibir un adeudo de agua por más de 600 mil; esa información se sustrajo de manera ilegal de Agua de Hermosillo, con la complicidad de alguno de sus empleados y se dio a conocer públicamente. A partir de eso, el organismo procedió a cortarle el suministro de agua y para reanudar el servicio pretenden que pague un consumo que data de 20 años atrás, incluyendo lo que la constructora Urbi consumió durante 15 años, lo que Célida López le exento y solamente de esa manera podría tener agua para regar el pasto, los árboles al interior y exterior del campo.
Las presiones de Rebeca Villanueva en ese sentido surtieron efecto. Con la complicidad de Agua de Hermosillo y una actitud de cerrazón, el Organismo Operador tomó parte en el conflicto y pretendieron asfixiar en una deuda impagable al Club Montecarlo de Beisbol Infantil. Pero no lo lograron, los niños llevan sus garrafones para regar las plantas, empresas privadas aportan pipas para regar el pasto y el lugar, a duras, penas sigue conservándose verde.
A principios de semana parecía abrirse una oportunidad de diálogo, luego de que Eduardo Velázquez fue citado por Daniel Durán Puente, funcionario del Ayuntamiento de Hermosillo que escuchó la narrativa de Velázquez y quien le dijo hablaría con la propia Rebeca Villanueva y con la Asociación de Vecinos de Montecarlo.
Parecía que el Ayuntamiento de Hermosillo estaba interesado en resolver de la mejor manera el tema; pero luego de eso, Eduardo Velázquez fue citado a Sindicatura a tener una plática con el subdirector de Bienes del Dominio Público, Zorobabel Lizárraga Fierro.
Además de la prepotencia, arrogancia y mala disposición mostrada por el funcionario, luego de una perorata leguleya le dijo que el Ayuntamiento le ofrecía el campo a cambio de una “módica” renta de 27 mil pesos mensuales. La cantidad no solamente es desproporcionada, es un engaño; es obvio que no va a aceptar un pago de esa naturaleza porque no tiene los recursos y entonces el Ayuntamiento puede decir que él se negó a aceptar un trato, sin mencionar lo injusto y desproporcionado que este es.
Lo curioso es que este funcionario de tercer nivel, de poco criterio y de muy poca catadura moral esconde otra intención: quitarle el campo donde el Ayuntamiento no invirtió nada y entregarlo a algún amigo, a la propia Rebeca Villanueva o a la Asociación de Vecinos de Montecarlo para que desde ahí sí hagan negocio.
En este tema se han movido todo tipo de influencias al interior del Ayuntamiento para perjudicar al Club Montecarlo; todas las palancas y las complicidades de los funcionarios han quedado expuestas y todo indica que esto se da con la complacencia del propio Alcalde Antonio Astiazarán Gutiérrez a quien Daniel Durán Puente seguramente ya la informó.
En este mar de complicidades, componendas e intrigas legaloides, no se perjudica a Eduardo Velázquez, se daña a los niños, niñas, mujeres y hombres que acuden a ese lugar a practicar deporte; se perjudica al Fraccionamiento Montecarlo porque se le está quitando un área verde que nada le cuesta y se perjudica a Hermosillo porque el Ayuntamiento, otra vez, va en contra de un espacio deportivo, de esos que casi no existen.
El asunto escaló y es que ahora el problema que generó Rebeca Villanueva, donde la apoyaron sus amigos y “palancas” del Ayuntamiento, ya alcanzó al alcalde Antonio Astiazarán Gutiérrez porque a final de cuentas será él quien termine siendo el responsable de los latrocinios y atropellos que están cometido los colaboradores que él nombró en Agua de Hermosillo, en Sindicatura Municipal, en Infraestructura Deportiva del Instituto del Deporte y será él quien se encargó de sepultar otro espacio deportivo y otra área verde que estaba llena de vida y alejando a los niñas y niñas de los vicios y las malas prácticas.
Lo único que se pide es la entrega en comodato del terreno al Club Montecarlo de Beisbol Infantil A.C. y con ello preservar un predio donde toda la comunidad puede participar.
Un predio que no tuvo problemas durante los gobiernos municipales de Alejandro López Caballero, Manuel Ignacio “Maloro” Acosta, Célida López Cárdenas, porque no era atractivo, ahora que ya es toda una realidad el Ayuntamiento de Toño Astiazarán lo pretende convertir en un negocio, sin invertirle nada, concesionándola por la módica renta mensual de 27 mil pesos mensuales.
Como que este gobierno municipal es enemigo de los baches y también de la práctica deportiva.
Tips cortitos pa´no enfadar:
1.- En lo que llega el arco detector de metales para San Carlos y mientras las autoridades de seguridad pública deciden si se ponen a trabajar o siguen contemplando como empeoran las cosas, otro negocio de San Carlos anuncio el cierre de operaciones de manera temporal hasta que alguien atine a actuar y salvaguardar a los clientes y empleados del clima de inseguridad.
Se trata del restaurante “Maukaa Beach Club” el cual “debido a la inseguridad que estamos pasando en estos momentos en San Carlos hemos tomado la decisión de cerrar esta semana”.
Hemos venido advirtiendo que la intensa promoción económica y turística de Alfonso Durazo puede ser flor de un día si no logran frenar los índices de criminalidad, las balaceras y en general la inseguridad pública que afecta a todos en Sonora.
2.- Luis Mario Rivera Aguilar fue nombrado subsecretario en la Secretría de Turismo, una buena adición de Célida López y un funcionario que más allá de su formación profesional siempre sabe cumplir en las encomiendas que se le asignan.
En el currículum profesional de Luis Mario destacan haber sido director de Radio Sonora, durante el gobierno de Guillermo Padrés; fue luego dirigente estatal el Partido Verde Ecologista de México –cuando estaba aliado al PRI–, fue diputado local prlurinominal por el PVEM en la legislatura pasada y luego que ese partido se alió a Morena, le tocó esta chamba de subsecretario en Turismo.
Lo va a hacer bien, solamente no lo hagan enojar porque además de que no tiene ciencia aborrecida, es de mecha muy cortita.
3.- Con el asesinato de Antonio de la Cruz, periodista de Ciudad Victoria, Tamaulipas ya llegamos a 12 colegas que son víctimas de la violencia y pierden la vida} solamente en lo que va de este año; esa es la cifra más alta de periodistas asesinados para un año durante cualquier gobierno.
El promedio de asesinatos de periodistas este 2022 es de dos al mes y la impunidad es del 100 por ciento. Antonio de la Cruz, además de su profesión de informar también era el titular del área de comunicación social de Movimiento Ciudadano en aquella entidad.
En este caso, como en el de los otros colegas reporteros y reporteras asesinados, los discursos de las autoridades salen sobrando, igual están de más los lamentos que emiten por sus redes sociales, lo que se esperaría es una resolución inmediata y castigo para los autores materiales e intelectuales.
Otros Juglares:
–“Necesitamos sentirnos seguros y que el gobierno haga su parte para brindarle seguridad a los turistas y a nuestros empleados”.
Es una frase que se puede adjudicar a muchas empresas, pero en este caso fue expresada en una carta por los propietarios del restaurante Maukaa Beach Club, de San Carlos, Guaymas quienes anunciaron que cerrarían operaciones durante esta semana por la inseguridad que padecen en ese destino turístico.
Gracias por su atención, hasta el viernes si Dios quiere. ¡¡Salud!!
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