El Juglar de la Red
Por Rafael Cano Franco
Entiendo que la universalidad de las ideas es el principio básico que sustenta el quehacer de las instituciones de educación superior; pero eso no implica ni obliga a aceptar que todas las ideas que ahí se vierten o expresan son correctas o aportan aspectos positivos para los estudiantes o la misma sociedad.
Cuando el ex gobernador Guillermo Padrés Elías aceptó la invitación para acudir con estudiantes de la Unison de la carrera de Ciencias de la Comunicación, él sabía –ignoró si quien lo invitó también lo sabía—que su presencia generaría polémica y no por estar revolucionando con ideas la administración pública, sino por la turbiedad que lo acompaña como ex gobernante.
Entiendo las manifestaciones de apoyo y los elogios de sus compinches en el gobierno, es de hombres manifestar lealtades a quienes les dio la oportunidad y les abrió el arca de los recursos públicos para que dispusieran de ellos a voluntad y sin reparos; pero es inadmisible pensar que quienes presumen de ser honestos aboguen, utilizando como pretexto, el concepto de la universalidad de ideas como factor de defensa para justificar la presencia del ex mandatario en las aulas universitarias.
Si Guillermo Padrés acudió a las aulas para exponer la fórmula que utilizó para que la opinión pública, del estado y del país, lo consideren uno de los gobernantes más corruptos en la historia de Sonora, pues bien. Si fue a hablar de políticas publicas exitosas y de acciones de gobierno trascendentes, se equivocaron de personaje.
Su sexenio fue todo un caso. Los escándalos de corrupción se sucedieron uno tras otro y el impacto generó un daño al PAN, partido que lo postuló, del cual todavía no pueden liberarse y les sigue costando en su credibilidad.
Que Guillermo Padrés visitara la cárcel por una temporada y luego saliera libre, no es sinónimo de que los sonorenses hubiesen cambiado la percepción que tienen de su gobierno y la forma tan rapaz como él y sus funcionarios se comportaron.
No estuve en la conferencia que impartió a los alumnos, pero me imagino que debió platicarles como su gobierno mandó golpear a periodistas; como despreció a los ciudadanos y los llamó “malnacidos”, como por su soberbia se negó a realizar cambios en su gabinete porque “era muy amigo de sus amigos” y como se fue alejando de la sociedad e incluso llegó al grado de cambiar hasta el horario del Grito de Independencia para que no le mentaran la progenitora los asistentes al evento.
Guillermo Padrés es un ex gobernante que no tiene credibilidad y su presencia en diversos espacios siempre genera comentarios en contra, eso indica que sigue siendo mal visto por los ciudadanos. Pero intenta “lavarse” todo el lodo que lo acompaña con diversos eventos, ninguno le ha servido.
Cierto que Guillermo Padrés no tiene ninguna restricción legal para aceptar este tipo de invitaciones y tampoco su presencia está vedada por la ley; pero si se considera que no tiene mucho valor su aportación en la formación de los estudiantes, eso ya nos da un indicativo de que su presencia salió sobrando.
El debate no debe centrarse entonces en si puede acudir o no a este tipo de invitaciones, es obvio que sí. Lo que se debe cuestionar siempre de él y de otros personajes similares, es el aporte de sus ideas y del progreso que generaron, de compartir experiencias positivas que trascendieron, de acciones que marcaron de manera positiva la historia de sus gobiernos y de las fórmulas que aplicó para combatir las malas prácticas y los actos de corrupción.
Es obvio que en este campo, Guillermo Padrés tiene muy poco o nada que aportar a esos alumnos.
Y para aquellos que invocan la universalidad de las ideas en una institución y que consideran que personajes negativos “algo pueden aportar para que los alumnos lo analicen con critero” que no se asusten si a una clase llevan como expositor a Ovidio Guzmán para que hable de relaciones entre organizaciones criminales con el sector gubernamental, o bien o a su papá para que hable de la creación de grandes corporaciones con impacto internacional, puede ser él o cualquier gran capo de las drogas.
Policías y ladrones
No se ha hecho mucho ruido en torno al asesinato del policía en retiro, Luis Manuel, de 54 años, que fue baleado en Puerto Peñasco cuando se ejercitaba; “El Puntillas”, como lo apodaban, ocupó la dirección de la Policía Estatal Investigadora (PEI), durante 9 meses del gobierno de Guillermo Padrés Elías y su último cargo como policía fue el de Comisario de la Policía Municipal de San Luis Río Colorado.
El fue asesinado en el interior de una unidad deportiva en Puerto Peñasco. Fue un ataque directo por personas que le dispararon desde un vehículo sedán.
A este crimen se agrega el del Jefe de Custodios del CEFERESO de Hermosillo, Óscar Manuel, quien fue asesinado a balazos, el 21 de marzo, en el fraccionamiento California Residencial mientras esperaba el trasporte que lo llevaría a su trabajo.
Existen muchas dudas respecto a las razones de estos asesinatos y por supuesto todo apunta al trabajo que realizaban, aunque las autoridades no descartan ninguna línea de investigación.
Así como asesinan a policías y ex policías, también resulta que hay agentes del orden que están coludidos con grupos criminales, al menos esa es la acusación que hace la fiscalía de Justicia a dos agentes en activo del municipio de Guaymas que ya fueron detenidos.
Ambos están acusados de ser informantes de un grupo criminal que asesino en San Carlos a un profesionista. Los policías habrían comunicado la información del vehículo y la ubicación de esa persona a los autores materiales e intelectuales del crimen.
Como corolario habría que reconocer que luego de 16 años, la Fiscalía detuvo a tres participantes en los hechos violentos que empezaron en Cananea y terminaron en las afueras de Arizpe, cuando un convoy de sicarios atacó Cananea y asesinó a seis polícias municipales y a varios civiles.
Al final fueron detenidos estos tres participantes en esos eventos y serán juzgados en Sonora.
Ricardo Acedo es el líder indiscutido del STIRT
Quienes festinaron los sucesos de hace unos días, cuando Ricardo Acedo Samaniego fue sacado de las oficinas del STIRT en la Ciudad de México, se adelantaron pensando que era el fin de su liderazgo. Aquí se advirtió de la importancia de conocer la versión del propio Acedo Samaniego y resulta que al conocerla no queda más que establecer que sigue siendo el líder innegable del STIRT.
Lo que sucedió es un caso de traición y deslealtad. Según explicó el propio Acedo Samaniego todo derivó de las ansias de Francisco Contreras, dirigente del STIRT en Cajeme que llegó a ocupar una curul en el Congreso del Estado y al que Acedo Samaniego le abrió las puertas del Comité Ejecutivo Nacional y le otorgó la importante cartera de la Dirección Jurídica.
Desde esa posición, Francisco Contreras empezó a tejer una red de complicidades con aliados de varias regiones de México para tratar de suceder a Ricardo Acedo Samaniego y logró el apoyo de dos damas, una de Oaxaca y la otra de Campeche, con quienes estructuró una serie de mentiras para exigir la renuncia de Acedo Samaniego.
Pero Ricardo Acedo conserva el respaldo de la gran mayoría de las secciones del STIRT en el país, derivado de un trabajo que ha generado logros para sus agremiados.
Al final, la mentira y la traición de aquellos a los que promovió salió a la luz pública y la intentona golpista no pasó de un mal momento para Acedo Samaniego, pero sin que tuvieran impacto al interior del Sindicato.
Los que festinaron la caída de Ricardo Acedo Samaniego, se adelantaron demasiado, todavía sigue siendo el líder del STIRT y no solamente institucional, también porque supo mantener la cohesión y el apoyo de la mayoría de sus secciones.
Como suele suceder con estas tormentas que azotan las instituciones, terminan por servir para hacer limpia y sacar a los mal agradecidos y a todos aquellos que se especializan en la traición y son unos desleales.
Otros Juglares:
–“Yo les pido, muchas horas, muchos días, meses, años, de conversación, de debate, de diálogos, de charlas, sobre lo que Luis Donaldo Colosio hizo por este país, es lo que Colosio merece. Hoy a 29 años de su magnicidio, Luis Donaldo Colosio aún vive en las calles, a lo largo y ancho de todo el país, en plazas, en parques, en las estatuas, en los bustos, en colonias y comunidades, en escuelas, y en todo lo que lleva su nombre, para remarcar su trascendencia. Pero, sobre todo, Colosio vive hoy en los corazones y mentes de millones de mexicanos y no podemos, no debemos, permitir que se desvanezca. Luis Donaldo Colosio Murrieta aún vive”.
Lo dijo el dirigente del PRI en Sonora, Rogelio Díaz Brown durante el aniversario luctuoso de Luis Donaldo Colosio, ayer se cumplieron 29 años de que el sonorense y candidato del PRI fuera asesinado en Lomas Taurinas, Tijuana, y más allá de que hay un detenido, su crimen sigue marcando la historia política de México de manera negativa porque sucedió en un momento donde la credibilidad de políticos y partidos estaba en su punto más bajo.
Gracias por su atención, hasta el lunes si Dios quiere. ¡¡Salud!!
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