El Juglar de la Red
Por Rafael Cano Franco
El presidente Andrés Manuel López Obrador realizó y sigue realizando intentos por conquistar la Suprema Corte de Justicia de la Nación y con ello someter al Poder Judicial; primero logró que el expresidente Arturo Zaldívar se volviera su incondicional y ya con eso tenía un pie metido en el máximo organismo jurídico de México.
La segunda parte fue ir colonizando con magistrados afines; para eso esperó que se vencieran los periodos de algunos magistrados y propuso a los suyos. Así fue como llegaron a la SCJN: Margarita Ríos Farjat, Yasmín Esquivel Mosa, Loreta Ortiz Ahlf, y Juan Luis González Alcántara, todos bajo el sello de ser “obradoristas”.
En ese momento no se debatió si estos personajes tenían o no conocimientos de leyes, documentalmente comprobaron que sí. Pero Juan Luis González y Margarita Ríos Farjat le dieron la espalda a López Obrador cuando él personalmente “cabildeó” con los 11 ministros que votaran en contra de invalidar el traslado de la Guardia Nacional a la SEDENA.
Eso lo llevó a calificarlos de “hipócritas” y los acusó de pasarse al bando de los “conservas” –así llama a quienes no simpatizan con él–; entonces, de once ministros que integran la SCJN, López Obrador solamente tenía tres que le eran leales; Arturo Zaldívar, Yasmín Esquivel y Loreta Ortiz.
A fines del 2022, Arturo Zaldívar debía dejar el cargo de presidente de la SCJN y para eso AMLO decidió que ese cargo correspondería a Yasmín Esquivel. Hacia allá se encaminaba cuando un reportaje la acusó de haber plagiado su tesis de licenciatura y ese escándalo terminó por relegarla del cargo y también desprestigió su presencia en la Corte.
El revés también trajo consigo el nombramiento de Norma Piña, como presidente y eso representó un alejamiento del presidente López Obrador con la Suprema Corte de Justicia, desde ese momento se enrareció el ambiente y AMLO se dedicó a desprestigiar al organismo judicial, sobre todo cuando los ministros votaron en contra de su Plan B electoral y con ello le asentaron un duro revés a la intención presidencial de controlar al INE.
Con discurso que AMLO endurecía a diario y con una Corte que no le es dócil, trascurrieron los días hasta que Arturo Zaldívar decidió renunciar a la magistratura para integrarse a la campaña de Claudia Sheinbaum.
El presidente López Obrador tenía entonces la oportunidad de proponer una terna al Senado de la República para que el cargo vacante fuera ocupado y en lo que puede considerarse un “fuera máscaras”, la propuesta no consideró experiencia en el poder judicial, probidad, imparcialidad y menos independencia de los perfiles, por el contrario, con la “traición” de González Alcántara y Margarita Ríos, la propuesta fue de “obradoristas” químicamente puros.
Su propuesta es la de Bertha María Alcalde Luján, hermana de la secretaria de Gobernación Luisa María Alcalde, ambas son hijas de la ex presidente del Consejo Nacional de Morena y del sindicalista Arturo Alcalde. Bertha María fue propuesta de López Obrador para que ocupara la presidencia del INE, pero su eminente parcialidad ideológica y su cercanía con funcionarios gubernamentales le impidieron ser considerada.
Otra propuesta es la de Lenia Batres Guadarrama, hermana de Martí Bartres, quien es el actual jefe de Gobierno de la Ciudad de México; ella es asesora del presidente López Obrador y de Claudia Sheinbaum, cuando ambas fueron jefas delegacionales, además fue diputada por el PRD, cuando AMLO militaba en ese partido y está afiliada a Morena.
La tercera propuesta es la de María Esthela Ríos González, quien se venía desempeñando como consejera jurídica del presidente, lo cual la imposibilita para acceder a la Suprema Corte por haber desempeñado ese cargo en el último año previó a la elección del magistrado faltante.
Es evidente que el presidente está no solamente retando al poder Judicial, también manifiesta su intención de controlar un sillón más y con eso sumar un voto a su causa.
Lo mejor es que si alguien de esta primera terna no es aprobado por el Senado, puede mandar una segunda y si igualmente se la rechazan entonces tendrá la facultad de nombrar al ministro faltante de manera directa.
No se trata de que el presidente tenga mayoría en la SCJN, el asunto es el grado de desfachatez en su propuesta, la manera tan burda de querer imponer personajes sin trayectoria en el poder judicial y cuyo único mérito es el de ser fieles y leales a la 4T, o sea al mismo López Obrador.
Tips cortitos pa´no enfadar:
1.- Ernesto de Lucas Hopkins va a dejar la diputación local y con ello le abre la puerta a su suplente, Pascual Soto para que asuma esa curul, no tendría nada de particular y sería un movimiento normal dentro del Congreso de Sonora en tiempos electorales.
El asunto es que Pascual Soto, es un duro crítico de la dirigencia del PRI aunque no ha renunciado a su militancia en ese partido, también es el representante de Xóchitl Gálvez en Hermosillo y al parecer también abrió un frente de batalla con el dirigente del PAN, Gildardo Real Ramírez y a todo eso se le debe sumar que busca ser candidato a un cargo de elección popular, sea federal o en lo local.
El asunto es que con tantos frentes abiertos, con los “encontronazos” que ha tenido con Rogelio Díaz Brown, dirigente del PRI y con Gildardo Real Ramírez, del PAN, ¿Qué partido lo postularía? Porque eso de pensar que será candidato ciudadano es algo que no va a pasar.
Lo de él no es una cuestión de capacidad o impreparación, es más bien un problema de cálculo político y de no tener filtros que le permitan evitar conflictos innecesarios.
2.- El Instituto Estatal Electoral y de Participación Ciudadana (IEEyPC) aprobó los topes de gastos de precampaña para diputaciones de mayoría relativa y de las planillas para los Ayuntamientos; lo aprobado por el Consejo General del IEEyPC establece que debe ser el equivalente al 20 por ciento de lo establecido para las campañas inmediatas anteriores, es decir la de 2021, según la elección de la cual se trate.
El Consejero presidente, Nery Ruiz Arvízu puso como ejemplo el caso de Hermosillo, donde el tope de gastos de precampaña es de aproximadamente 4 millones 678 mil 800 pesos, que deberán erogarse en el período de 20 días que deben cumplir tanto partidos políticos como los aspirantes. Las precampañas iniciarán el 22 de enero y deben concluir el 10 de febrero.
Más allá de que esto es simulación, porque hay precampañas adelantadas, a pesar de lo que diga el IEEyPC, al menos están fijando topes y fechas específicas.
En cuanto al padrón electoral dijo que el listado nominal de Sonora tiene inscritos, al 31 de octubre del 2023, 2 millones 254 mil 438 personas y mensualmente se incorporan a esa lista 10 mil 689 ciudadanos más; eso significa que a la fecha de la elección podrían incorporarse casi 85 mil personas.
3.- Al presidente López Obrador le entró la fiebre de cambiar de nombre a mares, lugares y espacios; por ello ahora que no pudo pronunciar la palabra Badiraguato, de inmediato empezaron a circular algunas bromas a ese respecto.
Aquí le dejamos una de esas ocurrencias jocosos: “Diputados de Morena proponen cambiarle el nombre a Badiraguato por otro que el presidente López Obrador sí pueda pronunciar.
“Alegan que ese nombre se lo pusieron “los conservadores” para hacerlo quedar como un tontejo al no poder pronunciarlo”.
Es broma, pero con presidente como el que tenemos, puede ser realidad.
Otros Juglares:
–“Samuel García –precandidato de Movimiento Ciudadano a la presidencia de la República—está haciendo el papel de esquirol, fue sometido y obligado por Andrés Manuel López Obrador para dividir a la oposición. Lo amenazó con que si no se registraba como aspirante presidencial le podrían abrir una investigación por facturero”.
Lo dijo el dirigente del PAN, Marko Cortés al cuestionar la honestidad de la aspiración del principal personaje de MC; a esas críticas se sumó Alejandro Moreno, dirigente nacional del PRI, quien aseveró: “un jovencillo de esa calaña pretende engañar a la población al actuar como lacayo de Morena”.
Gracias por su atención, hasta el viernes si Dios quiere. ¡Salud!