El Fideicomiso del Río Sonora, fue creado para atender tres aspectos importantes luego del derrame de tóxicos de la minera “Buena Vista del Cobre”, propiedad de Grupo México: el primero aspecto era atender la emergencia; lo segundo era iniciar acciones de contención del daño ambiental y la tercera parte era la remediación de la zona.
Obligada por el Gobierno Federal, Grupo México fondeó el Fideicomiso Río Sonora con un aporte inicial de 2 mil millones de pesos, que podían llegar en una primera parte a 5 mil millones de pesos; pero el techo financiero total no fue definido; lo único que quedó muy claro es que esa primer aportación no representaba el total.
Debe precisarse que en materia de atención a la emergencia, Grupo México cumplió pagando a ciudadanos, productores y empresas la parte correspondiente; se aclaró que no era una indemnización y que cualquier persona podía, además de recibir ese dinero, demandar a la empresa en forma particular por los daños ocasionados.
En materia de contención del daño ambiental, las acciones han sido a medias; finalmente ya se demostró que hay un daño severo al entorno ecológico de la zona y que se han incumplido con los compromisos asumidos de frente a todos los perjudicados en la zona.
Donde definitivamente Grupo México se muestra cicatero es en la parte de la remediación de la zona.
No se trata solamente de acciones a largo plazo para sanear el medio ambiente contaminado; la remediación también incluye la parte de atender la salud de los habitantes de los pueblos asentados en las orillas del río.
En este punto, quizá el más importante, Grupo México es omiso y en esa omisión cuenta con la complacencia de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), cuya displicencia para obligar a cumplir sus compromisos y aportar los recursos comprometidos para la remediación, simplemente no lo hace.
Grupo México, viene dejando a que el tiempo cubra con una capa de olvido sus compromisos: a la fecha no ha instalado las plantas potabilizadores en cada uno de los municipios del Río Sonora, esto a pesar de que hay estudios donde se cita que hay residuos de tóxicos en el cauce de agua principal y en algunos pozos que abastecen de agua potable a esas comunidades.
Pero la acción más dolosa y grave es haber dejado de financiar la Unidad de Vigilancia Epidemiológico y Ambiental de Sonora (UVEAS) que funcionaba de manera provisional en Ures y también decidió, de manera unilateral, cancelar la construcción de la UVEAS que atendería de manera definitiva cualquier complicación sanitaria o de salud que afectara a la población.
Que Grupo México incumpla con las acciones de remediación definitiva no tiene nada que ver con la aportación inicial de 2 mil millones de pesos, ni que se hubieran agotado porque era solamente un primer aporte; lo que sucede es que son las propias autoridades federales, en este caso Semarnat, las omisas y condescendientes con la empresa minera.
Tal y como lo hizo en “Pasta de Conchos”, en Coahuila; Grupo México le apuesta a la laxitud y al relajamiento de las autoridades federales para no cumplir sus compromisos con los habitantes del Río Sonora.
La mina “Buena Vista del Cobre” no ha dejado de operar en territorio sonorense, sigue contaminando el medio ambiente y no hay autoridad federal que la llame a cuentas y la obligue a cumplir con sus obligaciones.
“El que contamina, paga”, dijo la gobernadora Claudia Pavlovich durante su campaña; pero parece que esa sentencia no intimidó a Grupo México y eso dejó en la indefensión a miles de sonorenses que exigen garantías de sanidad en el medio ambiente, calidad en el agua que beben y servicios médicos para monitorear sus condiciones de salud.
A Grupo México no se le pide más de lo que puede hacer, de hecho con las ganancias anuales que tiene puede fondear y sacar adelante todos los compromisos, si no lo hace es por su falta de compromiso social y porque las autoridades federales se lo permiten.
Tips cortitos pa´no enfadar:
1.- Bien dicen que la lealtad se debe mostrar cuando las circunstancias son adversas y eso precisamente hizo el dirigente del PRI en Sonora, Gilberto Gutiérrez Sánchez ayer por la tarde.
“El Chanate” Gutiérrez acudió a la Ciudad de México para atestiguar la llegada a la dirigencia del PRI de Enrique Ochoa Reza; el nuevo dirigente, al iniciar su discurso, tuvo palabras de reconocimiento para Manlio Fabio Beltrones y estas fueron bien recibidas por el auditorio presente, que las aplaudieron en sus butacas.
Pero Gilberto, un hombre que le debe mucho a Manlio Beltrones, no solamente se limitó a aplaudir sentado, fue el primero en levantarse de su asiento y ese fue el detonante para que el resto del auditorio ovacionara de pie al ahora ex Presidente del CEN.
Parece un detalle nimio, pero en realidad tiene mucho valor porque refleja la lealtad y el aprecio a un personaje que, en los rituales del PRI, no puede ser objeto de muestras festivas o de reconocimiento, en todo caso se le trata con austeridad.
2.- La gobernadora Claudia Pavlovich volvió a mostrar que en eso de gestionar no tiene igual; durante buen rato estuvo insistiendo en el traslado de los dirigentes de la CNTE: Rubén Núñez, José Francisco Villalobos, Aciel Sibaja y Heriberto Margariño.
Ellos representaban un problema para la paz social de Sonora y en varias ocasiones la CNTE amagó con movilizar contingentes hasta Hermosillo para protestar por el encierro de sus dirigentes.
El caso es que los cuatro ya fueron trasladados a un centro penitenciario en Oaxaca y con ello se aleja el fantasma de protestas masivas en nuestra tierra solicitando que sean liberados.
3.- La verdad es que los tres candidatos que buscan dirigir al PAN, dan risa y lástima a la vez; pretenden “apantallar” con expresiones triunfalistas en sus comunicados, pero la realidad es que sus eventos han sido muy desangelados, y en no pocos casos rellenados con gente que ni militante es.
No hablo de uno en particular, se trata de los tres: Galván, Espinoza y Munro.
Está tan desabrido su proceso interno, que ni siquiera las puyas que se lanzan terminan por darle sabor a una elección donde la militancia no desea participar porque a los tres se les ve un fierro marcado en la piel.
4.- Salvo al Ayuntamiento de Hermosillo, al resto de los municipios de Sonora les importó muy poco la presentación en sesión de Cabildo, de la Ley de Protección Animal, por eso su impulsor, el diputado David Palafox Celaya visitó Navojoa y Cajeme para impulsar ante esas autoridades dicha ley.
Bueno, eso habla del grado de interés que generó esa legislación y de la importancia que tiene para las autoridades de los municipios…simplemente se la pasaron por el arco del triunfo.
Otros Juglares:
–“En los primeros 100 días visitaré las 32 entidades del país, quiero dialogar abiertamente con la militancia”, lo dijo el nuevo presidente del PRI, Enrique Ochoa Reza durante la XXVI Sesión Extraordinaria del Consejo Político del Tricolor al establecer ese compromiso para conectar de nuevo con los ciudadanos.