El Juglar de la Red
Por Rafael Cano Franco
Al inicio del gobierno de Alfonso Durazo nos dijo a los sonorenses que armaría un equipo de trabajo con los mejores perfiles y que estaría dando forma a una nueva clase política, mucho mejor preparada y más apta que aquella que gobernó en el pasado reciente.
Pero luego de mover a Omar del Valle Colosio, de la Secretaría de Hacienda a la Sidur; el nuevo gabinete es totalmente diferente al que inició. Solamente sobreviven en sus cargos originales: Aarón Grageda Bustamante en la SEC; Dolores del Río Sánchez en Seguridad Pública, Fátima Rodríguez en Sagarhpa y Guillermo Noriega en la Secretaría de la Contraloría.
El resto de secretarios fueron removidos por diversas causas, pero además hay otros que empezaron y salieron “pateando el pesebre” o bajo las sospechas de corrupción; otros más se fueron porque fueron sujetos a proceso y algunos más simplemente porque no pudieron con el cargo.
Una de las primeras renuncias fue la de Jesús Valencia, quien abandonó el cargo para irse a una posición en el gobierno federal; como que no le gustó mucho Sonora y menos tener que estar relegado en un cargo de tercer nivel, a pesar de que a él le encargaron muchos asuntos de relevante importancia política.
La señora Olga Armida Grijalva fue de los primeros movimientos, salió porque nunca pudo poner orden al interior de la Secretaría del Trabajo y luego de que dos de sus subsecretarios renunciaron advirtiendo la existencia de mandos paralelos, eso era indicativo del desastre y la falta de jefatura al interior. Llegó Francisco Vázquez y es momento de que más allá de las buenas intenciones no es capaz de mostrar sus habilidades.
Edgar Hirám Sallard empezó como titular del Sistema Estatal de Comunicación, desconocedor totalmente del cargo es responsable de la pésima imagen que todavía acompaña al gobernador Alfonso Durazo, lo removieron a un cargo menor, pero al menos para él no lo sacaron de la nómina. Tampoco ha generado resultados muy interesantes en el nuevo cargo como titular del Cedemun.
En su lugar llegó la jovencita Paulina Ocaña Encinas, ella inicio como directora de Telemax –donde no han designado director en casi 10 meses–; la nieta del doctor Ocaña llegó con buenas intenciones y muchos planes, pero es evidente que no le encuentra la cuadratura al círculo, no por incapacidad, sino por la complejidad del cargo que ocupa.
Quien fuera Secretario de Economía, Armando Villa Orduño también le dieron un “bajón” en la categoría y lo mandaron a la Comisión de Vivienda. Al igual que en la secretaría de Economía sigue inédito y desaparecido en su nuevo cargo.
La Secretaria de Turismo, Celida López Cárdenas estaba realizando un excelente trabajo y era evidente que eso la proyectaba como una eventual candidata; pero le cortaron las alas cuando la mandaron a la Jefatura de la Oficina del Gobernador.
En la Secretaría Jurídica empezó Adolfo Salazar Razo, pero era evidente que este personaje tiene la confianza y el respaldo del gobernador por eso, lo sacó de ahí para llevarlo a la jefatura de la Oficina del Ejecutivo y finalmente le dio la proyección más importante de su carrera el nombrarlo Secretario de Gobierno.
El nombramiento de Salazar Razo se debió a que el titular de la Secretaría de Gobierno, Álvaro Bracamonte le dieron chamba como secretario Técnico del Consejo Político Nacional de Morena, pero ciertamente su paso en la segunda posición más importante dentro del gabinete fue totalmente un desastre y poco o nada ayudó a contener los problemas políticos y sindicales que se le presentaron, se fue sin pena ni gloria.
Rodolfo Castro Valdez, “El Bagre” fue un funcionario que inició en la Jefatura de la Oficina del Ejecutivo, pero venía precedido de señalamientos de corrupción en el gobierno de Baja California y al final fue sometido a proceso y hasta una orden de aprehensión se giró en su contra; renunció al cargo para defenderse de las acusaciones. Siempre se dijo que este fue un error de Alfonso Durazo porque los actos de corrupción con que venía cargando lo iban a alcanzar.
Otro de esos perfiles que venían precedidos de una etiqueta de capaces y se consideraba parte de esa nueva clase política era Jesús Acuña Méndez, quien inició como director de Isssteson, pero antes de cumplir el primero año de gobierno se le pidió la renuncia y salió del cargo pateando el bote y así sigue. Lo perdieron la soberbia, su egolatría y la inmadurez.
El ex director del ISIE, Cuauhtémoc Galindo dejó hace poco menos de un mes ese cargo; su salida se enmarcó con un fuerte operativo montado por personal de la Controlaría, de la Fiscalía Anticorrupción y se fue junto con todo su equipo cercano de trabajo. La corrupción y la asignación opaca de contratos es la principal sospecha, pero es evidente que le dieron una relativa protección, todavía como pago a los servicios prestados en la campaña electoral como candidato “palero” que operó a favor de Morena.
La ex fiscal, Claudia Indira Contreras anunció la renuncia al cargo luego de “reflexionar sobre las necesidades que se requieren esa área con el gobernador Alfonso Durazo” y con ello abrió la puerta para que Gustavo Rómulo Salas Chávez llegara al cargo como la única propuesta del Gobernador.
Hace unos días renuncio Heriberto Aguilar Castillo a la Sidur, se va a coordinar la campaña de Claudia Sheinbaum en Sonora. La sorpresa no fue su renuncia, sino su relevo: el secretario de Hacienda, Omar del Valle Colosio.
A la Secretaría de Hacienda llega José Manuel Quijada, un personaje de quien se desconoce trayectoria, pero que asume el área financiera del gobierno de Sonora, de vital importancia.
Hay muchos otros nombres que podemos mencionar que han salido de los cargos que se les asignaron: Danilo Sotelo, Patricia Medina, Guadalupe Taddei, Carlos Zatarain.
Con todo lo anterior queda evidencia de que a unos meses del segundo informe de gobierno, las curvas de aprendizaje todavía son una constante en un gabinete que se ha modificado tanto y donde tantos se han movido que parece uno nuevo.
Pero se debe recordar que muchas veces se dijo que muchos de ellos no debían estar en los cargos que se les asignaron y hay otros que por más yerros que cometen ahí los mantienen pero al parecer eso no le causa dolores al gobernador Durazo.
Y todavía falta que se vayan los que van a buscar cargos de elección. Así nunca se alcanzará a completar la curva de aprendizaje y la mitad del sexenio se va a perder.
Tips cortitos pa´no enfadar:
1.- Pues más allá de la inconformidad que puede existir entre productores agrícolas del sur de Sonora es evidente que siguen indecisos en las acciones de protesta que pretenden realizar; ni siquiera los estimuló que el presidente López Obrador los acusara de corruptos y de formar parte de grupos opositores a su gobierno.
Nada, simplemente nada; pareciera que su postura no es tan firme y que el daño que tanto pregonan en la parte económica no es tan grave; si fuera de otra manera ya estuvieran pegando el grito en el silencio, bloqueando carreteras, protestando con marchas multitudinarias, pero a lo más que han llegado es a tomar parcialmente una caseta de peaje y luego la abandonaron por voluntad propia.
Con esa convicción no pueden aspirar a mucho apoyo o a que les pongan atención a sus demandas.
Otros Juglares:
–“Estamos iniciando una etapa nueva, sin dedazos, sin acarreos, sin cargada, y no tenemos favoritos, todos los que están participando tienen nuestro respeto y no es el presidente quien va a decidir. Mi familia cercana, mis hijos, mi esposa, no nos metemos en nada de este proceso. Estoy muy contento porque los que están participando son de primera”.
Lo dijo al presidente Andrés Manuel López Obrador al atajar la propuesta “barbera” de Marcelo Ebrard para que uno de sus hijos ocupara una nueva secretaria de estado desde donde se daría continuidad a los proyectos políticos y sociales de la cuarta trasformación. La propuesta fue rechazada por el hijo, Andrés Manuel López Beltrán y por el propio presidente López Obrador.
Gracias por su atención, hasta el jueves si Dios quiere. ¡Salud!
